Te vi... y parece ser
la última vez
que el detino permita
verte...
Nada más me podía llena
que estar contigo.
Al menos un efímero momento,
un pequeño tiempo de 5 horas al día.
Lo que más extrañaré
será tu bello rostro,
tu cabello despeinado y de ondas omnipresentes
y tu escencia... tu inconfundible escencia de mujer.
No sé mucho de ti:
de dónde vienes,
como encotnrarte...
ni como hablarte sé ahora.
Porque ahora puedo escribir
solo versos deprimentes
por tu amor que me fue esquivo.
Pero no te culpo...
Al contrario:
tengo una razón más
para vivir:
Esperarte.
En fin, quería evitar
todos aquellos sentimientos.
No era mi objetico enamorarme.
Pero aquí estoy... y me alegra
que haya sido de ti.
Llora un alma la despedida
en su interior, sin poder expresarse:
decirle un "te amo" más
o guardar su imagen para siempre...
Te veo ahí, alejarte
y me deprime aun más
la simple idea
de que quizá ya no te vuelva a divisar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario